Donde la tierra y el agua se entrelazan, encontramos cuatro casas que encarnan la esencia de la vida junto al arrozal. Cada una de estas viviendas, inmersas en la serenidad de su entorno, ofrece una experiencia única de conexión con la naturaleza y el espíritu del Delta del Ebro.
Nuestras casas son cabañas agrícolas y barracas de labranza que hemos ido rehabilitando para ofreceros una experiencia única. Por su enclave, podréis vivir unos días rodeados de arrozales, pájaros, flora y fauna autóctona.
Más de 500 especies de vegetación conforman un poblamiento florístico único. Destacan los cañaverales, los juncales, los eucaliptos, las madreselvas de río y, por supuesto, el ARROZ.
En cuanto a la fauna, las aves tienen una gran relevancia; Se han cuantificado entre 50.000 y 100.000 ejemplares de 300 especies diferentes, patos, garzas, abubillas, martines pescadores, flamencos ...